‘TIENES QUE GANÁRTELO’

James Hayden en el Highland Trail 550

El clima era el típico de la Highlands escocesas: lluvia que cae de todos los lados. Las temperaturas habían bajado a una sola cifra, apenas por encima del punto de congelación, y el sol de principios de verano colgaba sobre los Munros detrás de una cortina de nubes. James Hayden bajó de los senderos vacíos del bosque de Fisherfield hacia el pueblo de Kinlochewe. La penumbra dio paso a la oscuridad y las temperaturas siguieron bajando.

James estaba calado hasta los huesos. Ese mismo día había vadeado dos ríos cargando su bicicleta de montaña, incluyendo el pesado equipaje. ¿Debería haberse quitado la ropa seca en el diluvio para aguantar el chaparrón con la menor cantidad de Ropa para mantener algunas prendas secas? ¿O había hecho bien al continuar con sus impermeables y esperar a que proporcionaran una barrera entre el agua y su piel de gallina?

Optó por lo segundo, pero al final, no importó. Había conseguido atravesar los pantanos y senderos tan duro como pudo, pero no pudo invocar suficiente calor en su cuerpo para secar su ropa desde el interior. La avalancha de lluvia habían hecho imposible entrar en calor. Entrada la noche surgió otro dilema: ¿seguir adelante durante toda la noche con ropa mojada o detenerse, tratar de secarse y reanudar por la mañana? Mucho puede depender de tales elecciones; en medio de una carrera de ultra-resistencia, incluso las decisiones más pequeñas pueden tener enormes consecuencias.

"¿Podrías haber seguido con la ropa mojada? Por poder... ¿Sabía las consecuencias de hacer eso? No.

"No valió la pena el riesgo. Escocia no es el lugar idóneo para hacer este tipo de experimentos".

Encontró un bed and breakfast que accedió a lavar su empapada equipación y una vez que estaba seca, en las primeras horas de la mañana siguiente, reanudó su búsqueda para completar el Highland Trail 550.

El Highland Trail 550 es conocido con razón como una de las carreras off-road más difíciles del mundo. No es tan largo como el Tour Divide en los Estados Unidos, por ejemplo, pero lo que le falta en la distancia lo compensa con las difíciles condiciones escocesas. El 550 hace referencia a la distancia, en millas, y dentro de eso hay más de 16.000 m de escalada, todo en colinas cortas y muy empinadas. La ruta esta compuesta de SingleTracks en un 30% e incluso los riders más experimentados y capaces tendrán que recurrir al viejo recurso de cargar la bici.

Es una hermosa pieza de tortuosa brillantez, para el veterano ciclista de resistencia Alan Goldsmith, es una dura prueba de entrenamiento para el Tour Divide. El evento tiene una presencia mínima online, se aceptan a los participantes a discreción del organizador, y no hay interés comercial alguno.

"Es un grupo de personas con mentalidad similar que se reúnen para andar en bicicleta en el terreno más difícil. Eso es todo. La recompensa es que si terminas, obtienes una realización personal. Eso es todo", dice James.

"Se trata de que las personas tengan ese tipo de experiencias que te cambian la vida, y luego compartan esas experiencias con otros. Es una razón genuina y auténtica para correr una carrera".

La ruta atraviesa algunos de los mejores caminos de conducción todoterreno del Reino Unido, pero no lo ofrece con gusto. El viejo cliché sobre el clima escocés - puedes experimentar cuatro estaciones en un día - es cierto, aunque lo que no menciona es que a menudo tendrás suerte si te toca verano. La lluvia es una amenaza constante y cuando lo hace, los caminos se convierten en arroyos que se convierten en el mayor reto mas que la resistencia en si.

"Te vas a mojar y tendrás los pies mojados durante cuatro días", dice James.

"Todos en la carrera son humildes, y si no lo son las circunstancias les bajaran los humos.

James Hayden era todo un experto en ultra-resistencia en carretera cuando se presento por primera vez en el Highland Trail 550 en 2019, pero su estreno en off-road lo llevó a querer volver nada más terminar.

"De alguna manera en 2019 persuadí a Alan para que me dejara entrar. Tal vez él sólo quería echarse unas risas viéndome sufrir Yo no engañe a nadie dije que era nuevo en esto desde el primer momento. La verdad es que nunca había montado en una bicicleta de montaña".

Su regreso en 2021 fue muy diferente. La pandemia mundial había obligado a cancelar el evento de 2020 y en el contexto de las continuas restricciones sanitarias, por ejemplo los bothies de Escocia -cabañas comunales de montaña- estaban fuera de los límites de los corredores. El mayor inconveniente, sin embargo, para un corredor experimentado de ultra-resistencia fue que los baños públicos tampoco estaban permitidos como paradas nocturnas. Para un grupo muy pequeño de personas, el Covid ha significado perder la oportunidad de desnudarse y colgar su ropa húmeda debajo de un secador de manos mientras te apoyas en el botón.

"¡La gente no tendrá mi misma opinión, pero un baño público tiene todo lo que necesitas!" Afirma James .

Otra vez tuvo más suerte, como cuando pudo hospedarse en un B&B, donde el dueño accedió amablemente a lavar y secarle la ropa. Le costó un poco más de dinero y en el contexto de la carrera, le costó horas perdidas. A medida que avanzaba la carrera, su velocidad bajó y el tiempo no estuvo de su lado.

"Cuando me cansé, todavía podía subir las cuestas tan fuerte como podía al principio. Pero mi nivel de habilidad en bicicleta de montaña no es tan bueno, así que simplemente me pase toda la carrera fuera del radar", dice.

"Vi a un rider llamado Andrew Hutcheson alejarse de mí en el Great Glen Way. Tal vez no tenía la fuerza en sus piernas, pero tenía la habilidad. Si eres un piloto fuerte pero terrible en las cosas técnicas, no hay muchos lugares donde puedas sobresalir en esta carrera".

Terminó la carrera en tercer lugar, completando el recorrido unas horas cerca de los cuatro días. El ganador fue Liam Glen, quien completó la carrera en tres días y 10 horas. Una gran proeza de por si, pero incluso más impresionante es que lo hizo montado en una bici sin suspensión y con una sola marcha. Pero momentos como cuando pasó por Torridon al amanecer y cuando recorría la cordillera de Ben Nevis durante la puesta del sol hasta que salio la luna llena, se encargaron de mostrar a James la mayor razón de esta carrera

"A veces pasan estas cosas. Me encontré en estos lugares increíbles y no me importó que fuese con retraso porque llegué en el momento perfecto", dice.

"Tienes que tener momentos malos, para poder medir los momentos buenos. Si no pasas pos esos momentos duros, no te mereces los momentos cumbre. Hay que ganárselos".

FOOTNOTES Words by Richard Abraham, Translated by Eduardo Marina, Photos by James Robertson. Scotland, UK

© 2021 ENDURA